Las reducciones juegan un papel crucial en la optimización del flujo de fluidos y en la adaptación de diámetros de tuberías, lo que afecta directamente la eficiencia y la seguridad de las instalaciones. Estas reducciones, al eliminar discontinuidades, reducen la turbulencia y mejoran el flujo, lo que conduce a una operación más eficiente y un menor desgaste. Además, las
reducciones ayudan a evitar acumulaciones de sedimentos y facilitan el mantenimiento. Por lo tanto, al elegir reducciones, es fundamental considerar factores como el material, las dimensiones y las condiciones de operación para garantizar la integridad y la durabilidad de las redes de tuberías.